• Declaratoria se dio en el marco del Programa Virtual de fortalecimiento del liderazgo de mujeres del ámbito local en la gestión de los recursos hídricos.

El viernes 24 de septiembre, las participantes del “Programa Virtual de Fortalecimiento del Liderazgo de Mujeres del ámbito local en la Gestión de los Recursos Hídricos”, impulsado por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables y Forest Trends, e implementado por Cedepas Norte, desco y la Maestría en Gestión de los Recursos Hídricos de la PUCP, en el marco del Proyecto Infraestructura Natural para la Seguridad Hídrica, abordaron el tema de la participación de la mujer en la gestión de los recursos hídricos.

Las 25 participantes de este programa fueron seleccionadas entre 138 lideresas integrantes de organizaciones locales vinculadas a la gestión de recursos hídricos o recursos naturales de todo el Perú, por su trayectoria a favor de la gestión de los recursos hídricos en sus localidades.

En el evento virtual, las mujeres participantes suscribieron una declaratoria que, entre otras cosas, reconoce la importancia de la participación de las mujeres en la gestión de uno de los recursos naturales más valiosos, el agua, que es considerada fundamental para la subsistencia.

En el documento, se pone de manifiesto la preocupación de las mujeres por el abastecimiento y protección del recurso hídrico en todo el territorio del Perú. Esto, debido a que, las mujeres y niñas son las principales usuarias del agua para el consumo doméstico, la agricultura de subsistencia, la salud de sus familias y el saneamiento.

La declaratoria señala: “Desde el Programa de Liderazgo creemos que es necesario reconocer a la mujer como agente de cambio en la gestión de los recursos hídricos y la infraestructura natural asociada. Por lo tanto, en este espacio del Primer Foro de Intercambio “El rol de las mujeres peruanas en la gestión de los recursos hídricos”, hemos identificado la situación que nos afecta, que se detalla a continuación:

SITUACIÓN QUE AFECTA A LAS MUJERES:

1. El débil accionar de las entidades responsables en prevenir, controlar y recuperar los ríos que se encuentran afectados por la contaminación de diferentes fuentes (aguas servidas urbanas, industrias, turismo, etc.).
2. La falta de mecanismos de retribución de la cuenca baja y media para poder conservar las cuencas altas (cabecera de cuencas).
3. La escasa valoración de las costumbres ancestrales para el cuidado y protección del agua.
4. La débil e inadecuada administración del recurso hídrico en los diferentes usos (consumo humano, agricultura, industria).
5. La poca difusión y socialización de los documentos técnicos producidos por las instituciones en la gestión de recursos hídricos.
6. La degradación de las cabeceras de agua, afectando la calidad y cantidad de agua.
7. La poca priorización de la siembra y cosecha de agua.
8. El descuido de las fajas marginales de los ríos.

Algunas de las propuestas que se plantearon para abordar toda esta problemática fueron: fomentar la concientización de la población en la cultura del agua con énfasis en las niñas y niños, proponer la implementación de programas de educación ambiental para niños y niñas, fomentar el empoderamiento de las mujeres en el liderazgo de la gestión del recurso hídrico a nivel local, priorizar la siembra y cosecha de agua, y el presupuesto para la ejecución de la inversión, garantizar la protección de las fajas marginales de los ríos, para evitar una extracción desmedida de agregados, entre otras.

Foto portada: Ángel Arones Cisneros